Desde el 84, este restaurante se ha especializado en comida de agua dulce, y en la actualidad es el único establecimiento que cuenta con certificación ambiental de la Corporación Autónoma Regional del departamento del Meta.  

Ubicado en la entrada al municipio de Cumaral, y a la altura de la carrera 53, este interesante restaurante podría pasar desapercibido de no ser por un enorme y colorido mural que lo identifica con su nombre. Desde afuera no es mucho lo que se puede apreciar, sin embargo, tras avanzar por el parqueadero e ingresar al establecimiento, su decoración y arquitectura vernácula le dan sentido al certificado.  

Está rodeado por naturaleza y materiales orgánicos. Gran parte de la madera usada en la arquitectura del lugar es de árboles caídos o arrastrados por ríos, incluso las piedras y minerales de la región suelen ser usados para fabricar utensilios de cocina o recipientes. Además, la mayor parte de los vegetales presentes en las preparaciones provienen de una huerta instalada ahí mismo, en los predios del restaurante.  

Sus especialidades son la cazuela de rio, la cual incluye 5 diferentes clases de pescado, el chorizo de pescado, y la arepa de maíz nixtamalizado (curado con ceniza). Por otro lado, sus preparaciones están sujetas a cualquier requerimiento especial de los comensales: desde cantidades de sal o condimentos, hasta la inclusión o no de ciertos productos en las preparaciones. Se debe recordar que cada comida es preparada al instante y nada se recalienta.